Personalidad intensa y excesivamente amistosa debido a una anomalía cerebral
El síndrome de Williams, un tipo de personalidad que presenta un comportamiento extremadamente extrovertido pero ansioso, se desencadena por el desarrollo anormal de un circuito central enterrado profundamente en el centro frontal del cerebro, según científicos de los Institutos Nacionales de Salud.Los investigadores utilizaron tres tipos diferentes de imágenes cerebrales para identificar el área sospechosa en el cerebro de personas con síndrome de Williams, un trastorno genético poco común.
Cuando las exploraciones se compararon con las puntuaciones en una escala de calificación de personalidad, quedó claro que cuanto más fuertes aparecían estos rasgos de personalidad / temperamento en un individuo con síndrome de Williams, más anomalías había en una estructura cerebral específica, llamada ínsula.
"Las exploraciones de la composición, el cableado y la actividad de los tejidos del cerebro produjeron evidencia convergente de anomalías causadas genéticamente en la estructura y función de la parte frontal de la ínsula y en su conectividad con otras áreas del cerebro en el circuito", explicó Karen Berman, MD , del Instituto Nacional de Salud Mental (NIMH) de los NIH.
En el síndrome de Williams, hay una deleción de unos 28 genes, muchos de ellos involucrados en el desarrollo y el comportamiento del cerebro, en una parte específica del cromosoma 7. Los individuos con el síndrome carecen de habilidades visoespaciales y una tendencia a ser demasiado amigables con las personas, mientras que ansioso por eventos no sociales, como arañas o alturas. A menudo, las personas con el trastorno tienen problemas de aprendizaje, pero algunos tienen un coeficiente intelectual normal.
"Esta línea de investigación ofrece información sobre cómo los genes ayudan a dar forma a los circuitos cerebrales que regulan las conductas complejas, como la forma en que una persona responde a los demás, y por lo tanto es prometedora para desentrañar los mecanismos cerebrales en otros trastornos del comportamiento social", dijo Thomas, Director del NIMH. R. Insel, MD
Los primeros estudios de imágenes de los investigadores del NIMH encontraron tractos irregulares de las fibras neuronales que llevan a cabo comunicaciones de larga distancia entre las regiones del cerebro, probablemente como resultado de que las neuronas se mueven hacia los destinos equivocados durante el desarrollo temprano.
Para el estudio, los investigadores evaluaron a 14 voluntarios con síndrome de Williams intelectualmente normales y 23 controles sanos.
Se reveló a través de imágenes de resonancia magnética (IRM) que los pacientes habían disminuido el gris en la parte inferior frontal de la ínsula, que integra el estado de ánimo y el pensamiento. Sin embargo, habían aumentado la materia gris en la parte frontal superior de la ínsula, lo que se ha relacionado con procesos sociales y emocionales.
También se redujo la materia blanca, el cableado de larga distancia del cerebro, entre los centros de pensamiento y emoción. Estas anomalías estructurales y funcionales en la parte frontal de la ínsula se correlacionaron con el perfil de personalidad del Síndrome de Williams.
“Nuestros hallazgos ilustran cómo los sistemas cerebrales traducen la vulnerabilidad genética en rasgos de comportamiento”, explicó Berman.
El estudio se publica en línea en la revista procedimientos de la Academia Nacional de Ciencias.
Fuente: Institutos Nacionales de Salud