Oxitocina y los efectos bioquímicos de la traición
Los investigadores han descubierto la base neurofisiológica de la confianza humana y la reacción a que se vulnere.
En el estudio, los científicos pudieron demostrar que la hormona oxitocina juega un papel vital en el sentimiento de confianza, incluso después de una traición.
La capacidad de los seres humanos para vivir en sociedades se basa en la confianza. Ya sea en el amor o en la política, en la vida familiar o empresarial, la confianza siempre juega un papel importante. El interés fue igualmente alto cuando los investigadores de la Universidad de Zurich descubrieron hace tres años que la oxitocina promueve un sentimiento de confianza.
Sin embargo, se desconoce la base neurofisiológica de ese efecto y por qué la oxitocina aumenta la confianza.
Otra pregunta sin respuesta fue si la oxitocina puede influir en el comportamiento de la confianza, incluso después de que se haya traicionado la fe de una persona en otra.
Un equipo de investigación de la Universidad de Zúrich con el neurocientífico Thomas Baumgartner, el neuroeconomista Ernst Fehr y el psicólogo Markus Heinrichs ha determinado ahora que la oxitocina ejerce una influencia en la forma en que los seres humanos afrontan el abuso de confianza.
Los sujetos de prueba que recibieron un placebo reaccionaron a una traición a la confianza mediante una reducción en su nivel de confianza. Por otro lado, las personas que recibieron oxitocina por medio de un aerosol nasal no cambiaron su comportamiento de confianza.
Esta reacción diferente a un abuso de confianza se asocia con un patrón de activación muy específico en el cerebro. Los sujetos de prueba que recibieron oxitocina demostraron una menor activación en la amígdala, en las regiones del mesencéfalo y en el núcleo dorsal del caudatus.
Este patrón indica que la oxitocina reduce la activación en aquellas estructuras del cerebro que están involucradas no solo en lidiar con el miedo sino también en la adaptación de la conducta luego de una experiencia negativa como una traición a la confianza.
Estos nuevos hallazgos podrían ayudar a obtener un conocimiento más profundo de los trastornos mentales en los que el déficit social está a la vanguardia. Como explica el psicólogo Markus Heinrichs, se están examinando estudios clínicos en los que se combina una administración intranasal de oxitocina con terapia conductual estandarizada en el tratamiento de trastornos como la fobia social y la disfunción límite de la personalidad.
En el cerebro, la oxitocina parece ser principalmente un mensajero químico y se ha descubierto que es un factor importante en los comportamientos humanos, incluida la excitación sexual, el reconocimiento, la confianza y la ansiedad. Como resultado, la oxitocina ha sido llamada la "hormona del amor". También es una hormona clave para el parto y la lactancia.
El neurocientífico Thomas Baumgartner espera que los resultados conduzcan a una investigación fértil sobre trastornos mentales de ese tipo. En particular, el conocimiento sobre en qué parte del cerebro se manifiesta el efecto de la oxitocina podría ayudar en el desarrollo de medidas terapéuticas aún mejores.
El neuroeconomista Ernst Fehr agrega: “Hemos descubierto elementos significativos de la base neuronal de la confianza después de que se ha producido una traición a la confianza. En vista de la importancia de la confianza en la interacción social humana, estos resultados abren la posibilidad de poder sondear y aumentar nuestra comprensión general de la base neurofisiológica del comportamiento prosocial ”.
Las limitaciones de este estudio fueron que se realizó con un tamaño de muestra pequeño. La investigación debería replicarse en un tamaño de muestra más grande y diverso para garantizar que los hallazgos de los investigadores puedan generalizarse más.
Fuente: Universidad de Zurich
Este artículo ha sido actualizado desde la versión original, que se publicó originalmente aquí el 23 de mayo de 2008.