Sea consciente: 10 formas de vivir en el presente
¿Tiene problemas para vivir en el momento presente? Aquí hay 10 formas de conectarse a tierra en el ahora:
1. Pregunte. Como siempre, pregunta. Pregúntale al universo, pregúntale a tu yo superior. Pregúntale a un poder divino si crees en uno. Pide ayuda para estar presente.
2. Establecer una base diaria. Reserva de tres a cinco minutos al principio o al final del día para estar presente. Observe su respiración, su cuerpo, sus pensamientos y el mundo que lo rodea.
3. Tierra en el ahora. El mundo físico siempre existe en el ahora, por lo que puede estar presente si se conecta a tierra en lo que está sucediendo en el mundo físico. A continuación, se muestran algunas formas de hacerlo:
- Concéntrate en tu respiración.
- Concéntrese en los sonidos de su entorno.
- Concéntrese en las sensaciones de su cuerpo.
- Concéntrese en una parte particular de su cuerpo. Pon tu mano ahí y toma conciencia: esta es mi pierna ... rodilla ... brazo - lo que sea. Respirar. Esté con esa parte de usted mismo y observe cualquier sensación que ocurra allí.
- Concéntrese en algo de la naturaleza. Reduzca la velocidad y preste toda su atención. Respirar. Siente curiosidad por su esencia.
4. Mueva su cuerpo y concentre su atención en su movimiento. Los estiramientos, las posturas de yoga o un breve paseo por la manzana pueden ayudarnos a reconectarnos con el presente.
5. Mueva suavemente su atención. Cuando aparezca una distracción mental, cuando los pensamientos del futuro o del pasado te llamen, fíjate en ellos. Vea si puede verlos como lo haría un observador, en lugar de identificarse con ellos o seguirlos. Deje pasar los pensamientos y devuelva su atención al presente.
6. Utilice una palabra o imagen. A veces, ayuda concentrarse en una palabra o imagen. Puede repetirse lenta y silenciosamente una o más de estas palabras mientras respira: “Consciente. Despierto. Aquí. Ahora."
También puedes enfocarte en una imagen que simbolice vitalidad y presencia para ti: una llama, una flor, un árbol fuerte, un lago tranquilo u otro símbolo con significado personal para ti.
7. Que sea el destino final. Si está haciendo algo que considera un medio para un fin, replantee esa actividad como un fin en sí mismo. Por ejemplo, en lugar de pensar "Me estoy bañando porque me estoy preparando para salir a cenar", piensa "Me estoy duchando". Deje que la ducha sea una experiencia completa y rica en sí misma.
8. Pierde el archivo. Cuando esté realizando una actividad simple, como sentarse en el tráfico, cuando su mente comience a correr con su narrativa sobre el tráfico (todo basado en el pasado), pierda su archivo mental sobre esa actividad. Podría decirse a sí mismo: “No tengo idea de cómo es esta actividad. No tengo conocimiento de esta experiencia del pasado ".
Sienta curiosidad sobre la experiencia real que está teniendo en ese momento. Sea como un niño que experimenta algo por primera vez. ¿Cómo es ahora, qué está pasando? Vea si puede responder esta pregunta sin buscar palabras para describir su experiencia; en lugar de eso, simplemente toma conciencia de tu experiencia.
9. "Limpiar" las emociones para estar presentes: antes de entrar en una situación, haga un inventario rápido de todas las emociones del pasado que siente con usted, del día, la semana o el pasado lejano. Pide ayuda para dejarlos ir, de modo que puedas estar completamente presente emocionalmente en la situación que tienes delante.
10. Deja ir el lenguaje. Cuando esté en camino a una actividad o se esté preparando para el día, vea qué asociaciones tiene con uno de los conceptos para su día, puede ser "trabajo", "reuniones", "recoger a los niños", lo que sea está en tu calendario. Por hoy, suelte la etiqueta y los juicios u opiniones que tenga sobre esa cosa y, en cambio, concéntrese en su experiencia momento a momento.
Empiece a tratar estas actividades como si fueran misteriosas, innombrables, no categorizables, una realidad compleja, fluida, momento a momento. Sienta curiosidad y presente la verdadera realidad de su día. ¿Qué se simplifica demasiado y qué se pierde con todos esos conceptos y etiquetas?
Este artículo es cortesía de Spirituality & Health.