Una vida de alto propósito y bajo estrés en tres pasos

Incluso las personas más equilibradas y realizadas que conozco pasan por fases en las que buscan cultivar e integrar un mayor significado en sus vidas y reducir sus niveles de estrés. Ya sea que viva en un estado crónico de abrumador, en modo de piloto automático o simplemente necesite un reinicio, aquí hay tres pasos para acercarlo a un estado de determinación y equilibrio:

1. Evalúe su condición actual en cada uno de los siete dominios clave de la vida.

Es difícil saber adónde va cuando no sabe con qué está trabajando y dónde está su punto de partida. Por lo tanto, es fundamental hacer un inventario de dónde se encuentra ahora.

Evaluar su situación actual en términos de las siete áreas clave de la vida puede ayudar a crear estructura y enfoque a medida que avanza y también puede enfatizar áreas de fortaleza y áreas que necesitan crecimiento.

Estos siete dominios clave son:

  • Familia
  • Amigos
  • Finanzas
  • Aptitud
  • Campo (carrera)
  • Fe
  • Divertido

Recuerde ser brutalmente honesto consigo mismo en su evaluación para que pueda abordar mejor sus desequilibrios actuales para que pueda tener una idea precisa de lo que debe cambiar para que pueda avanzar hacia una vida con menos estrés y más satisfacción.

2. Establezca metas.

Por muy tentador que pueda ser (especialmente para los perfeccionistas y los que superan el rendimiento), el establecimiento de metas no es algo del tipo fregadero de la cocina, libre para todos. De hecho, los estudios han demostrado repetidamente que demasiados objetivos a menudo hacen que nuestra atención y nuestra energía sean demasiado débiles, lo que da como resultado resultados a medias en lugar de un progreso sólido en cualquier área.

Por lo tanto, una vez que haya completado la evaluación de los dominios de su vida, el siguiente paso es establecer siete objetivos.

No es necesario que haya un objetivo para cada categoría y, para la mayoría de las personas, suele haber una falta de equilibrio en algunas áreas de la vida más que en otras. Al elegir sus metas, recuerde que la intención es traer más equilibrio a su vida y estar más alineado con sus sueños y su yo superior.

Por último, asegúrese de que sus objetivos estén articulados en un formato SMART (específico, medible, alcanzable, relevante y con límite de tiempo). Tan fácil como es omitir este paso, le recomiendo encarecidamente que lea (preferiblemente en voz alta) sus metas escritas a mano todas las mañanas cuando se despierte y todas las noches antes de acostarse.

3. Planifique su viaje, paso a paso.

Se ha dicho que el viaje de mil millas comienza con el primer paso. Y cuán cierto es esto. Por lo tanto, cuando piense en el camino entre el lugar donde se encuentra y el lugar donde desea estar, tómese el tiempo para delinear cada paso del camino, por pequeño que sea. Tachar pasos, incluso si no son monumentales, crea un sentimiento de logro, dirección, refuerzo positivo y esperanza, todos los cuales son críticos cuando las cosas se ponen difíciles y te sientes desanimado.

Para progresar cada día y mantenerse concentrado y encaminado, cada noche antes de irse a la cama, tome una tarjeta y escriba solo tres pasos de acción concretos y específicos que tomará al día siguiente al servicio de uno (o más ) de las metas que estableció en el Paso 2. Mantenga esta práctica durante un año, habrá tomado más de 1,000 pasos de acción hacia el logro de sus metas y su mejor vida.

Además de los pasos relacionados con las metas, esta tarjeta de notas también puede incluir tareas y tareas diarias (es decir, comprar alimentos, pagar facturas, llamar a un amigo o familiar, etc.). En esta nota, tómese un tiempo cada noche para reconocer los logros que tiene cada día. Incluso si no se completa una lista de tarjetas de notas, es importante reconocer intencionalmente sus logros y las cosas por las que está agradecido (recomiendo llevar un diario de gratitud diario y escribir al menos 3 agradecimientos en él cada noche).

Entonces, ¿el equilibrio es realista?

Bueno, hasta cierto punto. No somos seres estáticos: cambiamos, evolucionamos y crecemos, y las diferentes estaciones de nuestra vida se encuentran con diferentes desafíos y oportunidades. El equilibrio es una práctica más que un estado. Es una búsqueda y no un destino. Una vida en equilibrio implica estar desequilibrado a veces, reconocer que está desequilibrado y tomar medidas para volver a calibrarse.

Al saber dónde se encuentra y hacia dónde se dirige en los siete dominios clave de la vida, y al actuar de acuerdo con su visión cada día, puede experimentar una vida más apasionada y significativa. Incluso en los momentos más locos y ocupados, la clave es mantenerse conectado con sus metas, valores y sueños. Estas cosas son únicas para usted y le darán a su vida un sentido de propósito y conexión.

!-- GDPR -->