Anorexia vinculada al área del cerebro relacionada con el hábito y la adicción
Investigadores del Centro Médico de la Universidad de Columbia, el Instituto Psiquiátrico del Estado de Nueva York, el Instituto de Comportamiento Cerebral Mental Mortimer B. Zuckerman y la Universidad de Nueva York encontraron que cuando las personas con anorexia nerviosa deciden qué comer, involucran una parte del cerebro asociada con el comportamiento habitual y adicción.
El hallazgo aparece en la revista Neurociencia de la naturaleza.
La anorexia nerviosa es una enfermedad grave y desconcertante. Incluso cuando sus signos clínicos se han vuelto cada vez más reconocidos, la tasa de mortalidad sigue siendo una de las más altas de cualquier trastorno psiquiátrico.
Una característica muy estereotipada de esta enfermedad es la selección persistente de alimentos bajos en calorías y grasas, a pesar del deseo de cambio del individuo. Los mecanismos cerebrales que subyacen a este trastorno alimentario persistente y restrictivo no están claros.
En el estudio actual, los investigadores utilizaron imágenes de resonancia magnética funcional, que rastrea la actividad en el cerebro en tiempo real, para monitorear a 21 mujeres con anorexia nerviosa y 21 individuos sanos mientras tomaban una serie de decisiones sobre qué alimentos comer.
Como era de esperar, las personas con anorexia nerviosa eligieron constantemente menos alimentos ricos en grasas. Además, las regiones del cerebro que utilizaron para tomar esas decisiones también fueron diferentes. Es decir, para las personas con anorexia nerviosa, las elecciones sobre qué comer se asociaron con la activación en el cuerpo estriado dorsal, una región del cerebro que se sabe que está relacionada con el control habitual de las acciones.
Además, la activación en los circuitos cerebrales fronto-estriatales durante el experimento predijo cuántas calorías eligieron consumir en una comida al día siguiente.
Estos hallazgos son los primeros datos objetivos que relacionan las anomalías en la actividad cerebral con la característica elección restrictiva de alimentos de las anoréxicas.
Los investigadores creen que el conocimiento abrirá vías completamente nuevas para el desarrollo del tratamiento y la comprensión de los mecanismos de la enfermedad.
"Ya estamos desarrollando una nueva intervención de psicoterapia basada en los principios de reversión de hábitos que ayuda a los pacientes con anorexia nerviosa a cambiar los comportamientos desadaptativos", dijo Joanna Steinglass, M.D., una de las autoras principales y profesora asociada de psiquiatría clínica en el Centro Médico de la Universidad de Columbia.
"A medida que mejoramos nuestra comprensión de los mecanismos cerebrales, también pueden surgir nuevos objetivos de medicación".
"Este estudio también puede ayudar a vincular la anorexia nerviosa con trastornos como el abuso de sustancias, el juego y otras afecciones que pueden involucrar elecciones relacionadas con la actividad excesiva en el cuerpo estriado dorsal", agregó Daphna Shohamy, Ph.D., autora y profesora asociada de psicología y investigador principal en Columbia.
“Es muy valioso estudiar cómo el cerebro toma decisiones tanto en salud como en enfermedad. Comprender cómo los circuitos cerebrales comunes para la toma de decisiones contribuyen a trastornos aparentemente no relacionados permitirá a los investigadores centrarse en los trastornos centrales y aprovechar los avances del tratamiento en diferentes trastornos ".
Fuente: Zuckerman Mind Brain Behavior Institute / EurekAlert