La lectura satisface la necesidad de pertenencia
Si le pregunta a alguien por qué lee, la respuesta suele ser para aprender o como un escape de la rutina diaria de la vida. Una nueva investigación encuentra que la lectura hace mucho más que “simplemente” educar o entretener.La psicóloga Dra. Shira Gabriel estudió cómo la lectura parece fomentar una conexión humana, es decir, a medida que leemos nos convertimos en parte de la comunidad descrita en la narrativa, incluso cuando el texto está ambientado en una tierra de fantasía ficticia. Esta conexión parece satisfacer la necesidad de pertenencia profundamente humana y evolutivamente crucial.
Los investigadores comenzaron por estudiar a 140 estudiantes universitarios sobre la medida en que satisfacen sus necesidades de conexión al identificarse con grupos.
Luego, algunos leyeron un pasaje de la novela "Crepúsculo" en el que el no muerto Edward describe lo que se siente al ser un vampiro para su interés romántico Bella. Otros leen un pasaje de "Harry Potter y la piedra filosofal" en el que los estudiantes de Hogwarts están separados en "casas" y Harry conoce al profesor de pociones Severus Snape.
A los participantes se les dio 30 minutos para leer el pasaje y se les indicó que simplemente lo leyeran por su propio placer.
Luego se utilizaron dos métodos para medir la afiliación psicológica de los participantes con vampiros o magos.
En el primero, se les pidió a los estudiantes que categorizaran, de la manera más rápida y precisa posible, las palabras "yo" (yo mismo, mío) y las palabras de "mago" (palo de escoba, hechizo, varita mágica, pociones) presionando la misma tecla cuando cualquiera de esos las palabras destellaron en la pantalla; presionaron otra tecla para las palabras "no-yo" (ellos, los suyos) y palabras de "vampiro" (sangre, colmillos, mordidos, muertos vivientes).
Luego, los pares se invirtieron. Gabriel y su equipo de investigación esperaban que los participantes respondieran más rápidamente cuando las palabras "yo" estaban vinculadas con un grupo al que pertenecía "yo", según el libro que leyeran.
Luego, los investigadores administraron lo que llamaron la Escala de Asimilación Colectiva Narrativa de Crepúsculo / Harry Potter, que consiste en preguntas que indican identificación con magos o vampiros.
Ejemplos: "¿Crees que podrías desaparecer y reaparecer en otro lugar?" y "¿Qué tan afilados son tus dientes?" Finalmente, cuestionarios cortos evaluaron la satisfacción con la vida y el estado de ánimo de los participantes.
Los resultados del experimento fueron los que cabría esperar: los lectores de Harry Potter "se convirtieron" en magos y los lectores de Crepúsculo "se convirtieron" en vampiros. Y las personas que estaban más orientadas a grupos en la vida mostraron los mayores efectos de asimilación.
Por último, "pertenecer" a estas comunidades ficticias proporcionó el mismo estado de ánimo y la misma satisfacción con la vida que las personas obtienen al afiliarse a grupos de la vida real.
Según los investigadores, el estudio muestra que la lectura no es solo un escape o una educación, sino que ayuda a satisfacer una profunda necesidad psicológica.
Fuente: Asociación de Ciencias Psicológicas