El ejercicio frecuente reduce los riesgos en adolescentes acosados

Un nuevo estudio encuentra que el ejercicio durante cuatro o más días a la semana puede resultar en una reducción del 23 por ciento en la ideación y los intentos de suicidio en adolescentes acosados.

En todo Estados Unidos, casi el 20 por ciento de los estudiantes informan haber sido acosados ​​en la propiedad escolar. Los efectos de ser acosados ​​incluyen desafíos académicos, baja autoestima, ansiedad, depresión, abuso de sustancias y autolesiones.

Se ha informado ampliamente que el ejercicio tiene fuertes efectos positivos sobre la salud mental, incluida la reducción de la depresión, la ansiedad y el abuso de sustancias.

Los investigadores utilizaron datos de una muestra representativa a nivel nacional de jóvenes participantes en la Encuesta Nacional de Conducta de Riesgo Juvenil (CDC), para examinar la relación entre la frecuencia de ejercicio, la tristeza y la ideación e intento suicida en 13.583 adolescentes estadounidenses en los grados nueve a 12.

Los autores plantearon la hipótesis de que la frecuencia del ejercicio estaría inversamente relacionada con la tristeza y las tendencias suicidas y que estos beneficios se extenderían a las víctimas de acoso.

Los investigadores descubrieron que en general, el 30 por ciento de los estudiantes estudiados reportaron tristeza durante dos o más semanas en el año anterior, y que el 22.2 por ciento y el 8.2 por ciento reportaron ideación e intento suicida en el mismo período de tiempo.

Los estudiantes acosados ​​tenían el doble de probabilidades de reportar tristeza y tres veces más probabilidades de reportar ideas o intentos suicidas en comparación con sus compañeros que no fueron acosados. El ejercicio cuatro o más días a la semana se asoció con una reducción significativa de la tristeza, la ideación suicida y el intento de suicidio en todos los estudiantes.

De manera notable, los datos mostraron una sorprendente reducción del 23 por ciento tanto en la ideación suicida como en el intento de suicidio en los estudiantes acosados ​​que hacían ejercicio cuatro o más días a la semana.

Con base en estos hallazgos, los autores concluyeron que el ejercicio puede representar una opción segura, económica y potencialmente altamente efectiva en la respuesta al acoso escolar.

El acoso escolar es una carga de salud pública grave y creciente cuyas consecuencias se informan a lo largo de la vida.

Los expertos recomiendan investigaciones adicionales para definir mejor los mecanismos detrás de estos hallazgos, así como el papel que puede desempeñar el ejercicio en la reducción de las consecuencias de salud mental a menudo graves para las víctimas. Además, el documento plantea la posibilidad de programas de ejercicio como un enfoque de salud pública para reducir el comportamiento suicida en todos los adolescentes.

Esta posición es una consideración particularmente importante debido al hecho de que muchas escuelas secundarias en nuestro país han reducido o eliminado los programas de ejercicio requeridos para los atletas no universitarios.

El estudio se publicará en una próxima edición del Revista de la Academia Estadounidense de Psiquiatría de Niños y Adolescentes (JAACAP).

Fuente: Elseveir / EurekAlert

!-- GDPR -->