Se cuestiona la teoría de la depresión por niveles bajos de serotonina

Un nuevo artículo desafía la opinión predominante de que la depresión está relacionada con niveles bajos de serotonina en los espacios entre las células nerviosas del cerebro.

Esta teoría ha predominado durante casi 50 años y ha llevado al desarrollo de los medicamentos antidepresivos comúnmente recetados llamados inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina o ISRS. Pero nunca se ha probado.

La ciencia detrás de muchos medicamentos antidepresivos parece estar al revés, dicen los autores de un artículo publicado por la revista. Reseñas de neurociencia y bioconducta.

Los ISRS mantienen altos los niveles del neurotransmisor (serotonina) al bloquear su reabsorción en las células que lo liberan.

Pero esos medicamentos que aumentan la serotonina en realidad dificultan la recuperación de los pacientes, especialmente a corto plazo, dijo el autor principal Paul Andrews, profesor asistente de psicología, neurociencia y comportamiento en la Universidad McMaster en Canadá.

"Es hora de que reconsideremos lo que estamos haciendo", dice Andrews. "Estamos tomando a personas que sufren las formas más comunes de depresión y, en lugar de ayudarlas, parece que estamos poniendo un obstáculo en su camino hacia la recuperación".

Cuando los pacientes deprimidos que reciben medicación ISRS muestran una mejoría, parece que sus cerebros están superando los efectos de los medicamentos antidepresivos, en lugar de ser asistidos directamente por ellos. En lugar de ayudar, los medicamentos parecen estar interfiriendo con los propios mecanismos de recuperación del cerebro.

“Hemos visto que las personas informan que se sienten peor, no mejor, durante las primeras dos semanas con antidepresivos”, dice Andrews. "Esto podría explicar por qué".

Actualmente, es imposible medir exactamente cómo el cerebro libera y usa la serotonina, escriben los investigadores, porque no existe una forma segura de medirla en un cerebro humano vivo.

En cambio, los científicos deben basarse en la medición de la evidencia sobre los niveles de serotonina que el cerebro ya ha metabolizado y en la extrapolación de estudios con animales.

La mejor evidencia disponible parece mostrar que se libera y usa más serotonina durante los episodios depresivos, no menos, dicen los autores.

El nuevo artículo sugiere que la serotonina ayuda al cerebro a adaptarse a la depresión reasignando sus recursos, dando más al pensamiento consciente y menos a áreas como el crecimiento, el desarrollo, la reproducción, la función inmunológica y la respuesta al estrés.

Andrews, un psicólogo evolutivo, ha argumentado en investigaciones anteriores que los antidepresivos dejan a los pacientes en peor forma después de que dejan de usarlos, y que la mayoría de las formas de depresión, aunque dolorosas, son adaptaciones naturales y beneficiosas al estrés.

Fuente: Universidad McMaster

!-- GDPR -->