Cómo hacer su vida más feliz a través de las redes sociales

Como muchas cosas, las redes sociales se pueden usar para bien o para mal. No es inherentemente malo, pero hay muchos efectos secundarios del uso excesivo que nos perjudican.

Sin embargo, no solo podemos aprender a evitarlos, ¡incluso podemos usar las redes sociales para hacernos más felices!

Las redes sociales son una poderosa herramienta de procrastinación, pero muchos estudios han demostrado que pueden ser perjudiciales para su bienestar general. Se ha establecido un vínculo directo entre pasar demasiado tiempo en Facebook y la depresión; incluso puede causar problemas físicos a quienes luchan con su peso.

Quizás lo más perturbador es la evidencia que muestra que obtener esos codiciados "me gusta" y comentarios hace que su cuerpo libere dopamina, la sustancia química relacionada con los sentimientos placenteros. Su cuerpo libera dopamina en una amplia variedad de circunstancias, desde ver una foto de alguien que ama hasta comer comida deliciosa.

Facebook puede bombardearlo con experiencias que inducen dopamina en sacudidas de corta duración que lo dejan con ganas de más, similar a cómo se siente un jugador o un alcohólico cuando se involucra en un comportamiento adictivo.

Aunque la evidencia científica es difícil de discutir, no necesitamos estudios que nos digan que las redes sociales pueden hacer daño. Como explica Pavithra Mehta, "Vivimos en una época en la que dominamos el arte de" gustarnos "en línea, pero hemos olvidado el arte de amarnos en la vida real".

Las redes sociales nos brindan interacciones de "un clic" en lugar de interacciones más ricas y de "corazón animado". Las interacciones animadas son aquellas en las que estás realmente presente con otro, interactuando con él o ella como una persona plena y tomándote el tiempo para mejorar la relación de manera reflexiva. Esto es por lo que nos esforzamos los seres humanos: vínculos auténticos que elevan, mejoran y profundizan nuestras conexiones para que respetemos y admiremos quiénes somos realmente.

Las interacciones de "un clic" son las que la mayoría de las personas tienen en línea. Analizamos cientos de actualizaciones superficiales y adulamos a los demás con "me gusta" y validación. Damos, y recibimos, ese golpe de dopamina con nuestros compañeros adictos. Somos rápidos para hacer clic y lentos para brindar respuestas reflexivas y alentadoras.

Nos sentimos inadecuados cuando vemos las vidas aparentemente perfectas de otros en imágenes y actualizaciones impresionantes y altamente seleccionadas. Esto no es auténtico, a pesar de que hacemos lo mismo con nuestras propias actualizaciones. Es un círculo vicioso que conduce a un fenómeno en el que las personas se sienten más solas.

Todo este ruido de las redes sociales elimina el silencio que tenemos en las interacciones con el corazón. Piense en ello como un fuego. Un fuego se hace con madera, pero el fuego existe debido a los espacios entre los palos y los troncos. De la misma manera, las palabras auténticas encienden el fuego de una relación y forman verdaderas conexiones. La forma en que interactuamos en las redes sociales es como encender muchos fósforos que se queman rápidamente pero que nunca inician un fuego rugiente.

Las redes sociales han provocado una epidemia de desconexión entre jóvenes y adultos por igual. La mejor manera de contrarrestar esto es convertirse en un participante concienzudo y usar las redes sociales para acercarse más a sus verdaderos amigos. Aqui hay algunas ideas.

  • Desafía a la gente.

    No tenga miedo de eliminar a las personas negativas o poco auténticas. Es difícil ser tu verdadero yo si constantemente te preguntas: "¿Qué pensarán de mí?" Los verdaderos amigos quieren celebrarte, mientras que otros se apresuran a juzgarte.

  • Haga clic en la vida real.

    Complemente las interacciones en línea con las de la vida real. Celebre las actualizaciones de los demás, pero luego tome un café y cree una intimidad compartida.

  • Haz una pausa antes de publicar.

    Deja de compartir cosas que carecen de sustancia. Si publica enlaces e imágenes populares para que otros los validen, probablemente esté cayendo en la trampa de la despersonalización. Antes de publicar, pregúntese si su actualización es genuina, positiva y edificante.

  • Limpia tu vecindario.

    Si su vecindario está lleno de basura, puede seguir contaminando o puede reunirse con sus amigos y limpiarlo para beneficio de todos. Deja de hacer cosas por obligación o por estupidez. Decidir como grupo fomentar un enfoque que cree una experiencia positiva. Descubrirás que una vez que "limpias" tu vecindario social, se convierte en un lugar acogedor para otras personas.

  • Detén los golpes de dopamina.

    Apague sus alertas. Las notificaciones incesantes nos recuerdan que necesitamos ese próximo golpe de dopamina, lo que nos lleva a usar las redes sociales cada vez más para obtener la validación. Es una trampa.

Las redes sociales parecen inofensivas, pero pueden tener efectos negativos en la autoestima y las relaciones de los usuarios. Su objetivo al usar las redes sociales debe ser simplificar. Concéntrese en compartir y responder solo a aquellas cosas que elevan sus relaciones. Como dijo Antoine de Saint-Exupéry, "Un diseñador sabe que ha alcanzado la perfección no cuando no hay nada que agregar, sino cuando no hay nada que quitar".

!-- GDPR -->