Las variantes genéticas pueden predecir la respuesta al antidepresivo
Para individualizar la terapia con medicamentos, los investigadores han estado investigando posibles biomarcadores genéticos que podrían ayudar a predecir la respuesta de un individuo a los medicamentos. Ahora, un nuevo estudio encuentra que ciertas variaciones genéticas pueden ayudar a determinar si los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) serán efectivos en personas con depresión.
Los hallazgos, publicados en el La Revista Estadounidense de Psiquiatría, muestran que las variaciones dentro del gen responsable del metabolismo del escitalopram (el ISRS Lexapro) pueden dar lugar a diferencias extremas en los niveles del fármaco alcanzados en los pacientes, a menudo demasiado bajos o demasiado altos. Por lo tanto, prescribir la dosis de escitalopram en función de la constitución genética específica de un paciente mejoraría enormemente los resultados terapéuticos en estos casos.
El estudio, que involucró a 2.087 pacientes, se llevó a cabo en el Karolinska Institutet de Suecia en asociación con investigadores del Hospital Diakonhjemmet en Oslo, Noruega.
Los ISRS son uno de los tratamientos farmacéuticos prescritos con más frecuencia para la depresión, siendo el escitalopram el que se administra clínicamente con mayor frecuencia. Sin embargo, la terapia con escitalopram está actualmente limitada por el hecho de que muchos pacientes no responden bien al fármaco. De hecho, algunas personas desarrollan reacciones adversas que requieren la interrupción del tratamiento.
Durante el estudio, los investigadores descubrieron que las variaciones en el gen que codifica la enzima responsable del metabolismo del escitalopram (CYP2C19) juega un papel muy importante. Los pacientes con una variante del gen que promueve una mayor expresión enzimática tenían niveles sanguíneos de escitalopram demasiado bajos para afectar los síntomas de depresión, mientras que los pacientes con un gen CYP2C19 defectuoso alcanzaron niveles de fármaco que eran demasiado altos.
En general, un tercio de los participantes del estudio alcanzaron niveles sanguíneos de escitalopram que eran demasiado altos o demasiado bajos.
Es importante destacar que los investigadores encontraron que el 30 por ciento de los pacientes portadores de variantes genéticas que causan niveles de enzimas excesivos o inadecuados cambiaron a otros medicamentos en el plazo de un año, en contraste con solo el 10 a 12 por ciento de los pacientes portadores del gen común.
“Nuestro estudio muestra que la genotipificación de CYP2C19 podría tener un valor clínico considerable para individualizar las dosis de escitalopram, de modo que se pueda lograr un mejor efecto antidepresivo general para los pacientes”, dijo el profesor Magnus Ingelman-Sundberg del Departamento de Fisiología y Farmacología del Karolinska Institutet. , quien dirigió el estudio junto con el profesor Espen Molden.
"Debido a que CYP2C19 está involucrado en el metabolismo de muchos ISRS diferentes, el hallazgo también es aplicable a otros tipos de antidepresivos".
La depresión mayor es uno de los problemas de salud más comunes y graves del mundo. Al menos entre el ocho y el 10 por ciento de la población de EE. UU. Sufre depresión mayor en un momento dado. Se caracteriza por un estado de ánimo depresivo persistente y pérdida de interés en las actividades.
Fuente: Karolinska Institutet