La atención colaborativa ayuda a los adultos con síntomas depresivos
Una nueva investigación encuentra que la atención colaborativa, a menudo realizada por teléfono o en un entorno de telesalud, puede beneficiar a los adultos mayores con depresión por debajo del umbral, aquellos con algunos síntomas depresivos pero sin un diagnóstico de depresión en toda regla.
Los expertos explican que los trastornos depresivos están presentes en aproximadamente el 10 por ciento de los pacientes de atención primaria y representan más años vividos con discapacidad que cualquier enfermedad. Casi tres cuartas partes de todas las visitas ambulatorias por depresión son a médicos de atención primaria en lugar de a especialistas en salud mental.
Aunque la depresión es la segunda causa principal de discapacidad en todo el mundo, solo una de cada siete personas mayores cumple los criterios de depresión. Como tal, se necesitan estrategias terapéuticas efectivas en personas mayores con síntomas depresivos.
La atención colaborativa es una intervención terapéutica en la que la salud del comportamiento se integra en la atención primaria, por lo general utilizando un administrador de atención de enfermería para controlar los síntomas depresivos en pacientes deprimidos y ajustar el tratamiento bajo la supervisión de un psiquiatra.
En el JAMA El estudio, Simon Gilbody, Ph.D., de la Universidad de York, Inglaterra, y sus colegas asignaron al azar a 705 adultos de 65 años o más con depresión subumbral a atención colaborativa o atención primaria habitual.
La atención colaborativa fue coordinada por un administrador de casos que evaluó las deficiencias funcionales relacionadas con los síntomas del estado de ánimo. A los participantes se les ofreció activación conductual y completaron un promedio de seis sesiones semanales.
Muchos de los contactos con las enfermeras se realizaron por teléfono, lo que aumentó la eficiencia de la atención colaborativa.
La atención colaborativa resultó en puntuaciones más bajas que la atención habitual a los cuatro meses de seguimiento en las medidas de gravedad de la depresión autoinformada. La proporción de participantes que cumplieron con los criterios para la depresión fue menor para la atención colaborativa (17,2 por ciento) que la atención habitual (23,5 por ciento) a los cuatro meses de seguimiento y a los 12 meses de seguimiento (15,7 por ciento frente a 27,8 por ciento).
“Aunque las diferencias persistieron durante 12 meses, los hallazgos están limitados por el desgaste y se necesita más investigación para evaluar la eficacia a largo plazo”, escriben los autores.
Fuente: JAMA / EurekAlert