Asumiendo los peores rasgos de su novio

Soy una mujer de 49 años en una relación con un hombre muy celoso y controlador. Tiendo a ceder a sus demandas incluso cuando no son razonables, como tener que saber dónde estoy todo el tiempo. Lo extraño es que con el tiempo he comenzado a ser mucho más celoso y posesivo, aunque nunca fui así en ninguna de mis relaciones pasadas. Nunca fui del tipo que fisgonea u obsesiona sobre la relación. Siempre confié en la gente y les di su espacio. Él también puede ser muy irascible y yo me encuentro discutiendo y enojado también, aunque solía ser casi ridículamente evitativo de los conflictos. ¿Por qué estoy empezando a imitar los rasgos en él que ni siquiera me gustan? No siento que lo esté haciendo conscientemente y siempre me sorprende cuando lo noto.


Respondido por la Dra. Marie Hartwell-Walker el 2018-05-8

A.

Gracias por escribir. Lo que está describiendo no es inusual en alguien que ha sido abusado regularmente en una relación, ya sea en la familia de origen o en una relación. No quieres ser una víctima. Quieres ser alguien que no pueda ser víctima. La alternativa más obvia es volverse como el victimario que parece tener todo el poder, el control y las opciones en la relación. El problema es que cuando una persona que suele desempeñar el papel de víctima intenta lo contrario, a menudo se horroriza. No quieren comportarse como la persona a la que odian o faltan al respeto. A falta de otra opción, vuelven a ser una vez más víctima. Se siente más familiar. Es mejor que ser un abusador.

Lo que una persona en esta situación no se da cuenta es que otra alternativa es convertirse en un adulto igualitario y que se respete a sí mismo en una relación. Eso significa cuidarte a ti mismo. Significa negarse a ser irrespetado, pero también a tratar a otras personas con respeto. Significa establecer límites claros de lo que es aceptable para usted. Significa defenderse a sí mismo con calma y claridad. No hay necesidad de pelear, discutir o ser abusivo si eres fuerte y claro acerca de lo que aceptarás y no aceptarás. Significa encontrar el coraje y el respeto por uno mismo para dejar o terminar cualquier relación que sea dolorosa.

Cuando una persona ha estado en una relación abusiva, a menudo es difícil encontrar y mantener esa otra alternativa. Si cree que eso es cierto, probablemente le resulte útil buscar asesoramiento o terapia. Es probable que un centro de mujeres local tenga un grupo de apoyo o consejeras que puedan brindarle consejos prácticos y el apoyo que necesita para recuperar el respeto por sí misma, a menudo a bajo costo o sin costo alguno.

El primer paso para hacer un cambio es reconocer que algo anda mal. Lo has hecho. Bien por usted. Ahora, por favor, dé el siguiente paso y obtenga el apoyo que necesite para seguir adelante.

Te deseo lo mejor
Dr. Marie


!-- GDPR -->