3 claves para convertirse en un comedor consciente

La alimentación consciente nutre tu cuerpo con comida y tu mente y corazón con paz. Se basa en el cuidado y la compasión. Implica escuchar con calma y anular el tirón a menudo frustrante de la alimentación emocional.

Para comenzar y ayudarlo a concentrarse, hágase algunas preguntas:

  • ¿Qué pide tu cuerpo?
  • ¿Qué necesitas para nutrirte?
  • ¿Cuál es tu nivel de energía?
  • ¿Qué tipo de combustible necesitas ahora: comida, motivación, inspiración, paz?
  • ¿Cuáles son tus necesidades emocionales?
  • ¿A dónde te lleva tu corazón?
  • ¿Dónde puede acercarse a un equilibrio entre mente, cuerpo y corazón?

Puede ser difícil responder estas preguntas de manera reflexiva al principio. A veces, las emociones, los pensamientos y los recuerdos lo arrastran, y no está claro qué elección calmará los pensamientos y sentimientos fuera de control. El anhelo de comida puede parecer incontrolable a veces. Permítase un descanso para descubrir lo que necesita y cómo nutrirse a medida que lo experimenta.

Las 3 claves para comer conscientemente son:

1. Mente: ¿Cómo te sientes emocionalmente?

La mayoría de nosotros tenemos sentimientos básicos como enojo, tristeza, felicidad y aburrimiento. Una de las mejores cosas de la alimentación consciente es que puede ser más específico. Desarrolla más opciones con una mayor conciencia emocional. Por ejemplo, hay muchas formas de describir la felicidad: alegría, júbilo, regocijo, deleite, bienestar y alegría, para algunos.

Cada uno de estos sentimientos tiene una cualidad diferente y es una experiencia de felicidad diferente. Puede trabajar con la emoción para identificarla claramente, de modo que ya no necesite comer emocionalmente para afrontarla. Es posible encontrar plenitud, felicidad y paz en su relación con la comida.

2. Cuerpo: ¿Cómo te sientes físicamente?

La alimentación consciente requiere que se registre consigo mismo con regularidad y conozca sus sutiles señales físicas. Una relación sana se basa en la confianza y el respeto mutuo. Tu relación con las señales de hambre y saciedad de tu cuerpo también necesita confianza y respeto. Para ser un comedor consciente, debe detenerse, escuchar y tener mucho cuidado. Tómese el tiempo para registrarse y esperar una respuesta.

La negación o los juicios bruscos lo alejan de la conciencia. Para despejar su mente, respire profundamente tres veces. Luego, simplemente escuche a su cuerpo para tener una idea de lo que necesita. Si tienes hambre, come. Si no tiene hambre, haga otra cosa.

3. Corazón: Reflexión tranquila.

La tercera clave para convertirse en un comedor consciente es estar tranquilo y escuchar a su corazón con la libertad de la conciencia. Adopte una perspectiva reflexiva y centrada, en lugar de una actitud inconsciente y codiciosa de "solo lo quiero". Las elecciones ya no son difíciles; simplemente son. Muy a menudo, se le puede animar a hacer lo mejor para otras personas o arriesgarse a ser egoísta: una perspectiva en blanco o negro. Pensar en la vida como menos blanco o negro y más gris es más realista.

Deténgase por un momento y póngase en la ecuación. Tenga en cuenta lo que necesita: cuidar sus emociones, alimentarse, espacio y tiempo de tranquilidad, realizar una actividad física que le resulte enriquecedora. Ser amable y gentil contigo mismo profundiza tu relación contigo mismo y hace una gran diferencia al final.

Las tres claves para convertirse en un comedor consciente son sencillas y puede comenzar hoy. Como todas las cosas buenas, la alimentación consciente requiere tiempo para desarrollarse. Con la práctica, puede aprender a nutrir su relación con su mente, cuerpo y corazón a lo largo de su vida, con conciencia y paz.

!-- GDPR -->