4 consejos para unas vacaciones saludables
Cada año durante la temporada navideña, mis rutinas, que de otro modo habían sido cuidadosamente construidas, se descarrilan. A pesar de mis mejores intenciones, me encuentro excediéndome de muchas maneras cada final de otoño y principios de invierno. Además, experimento un nivel de estrés que supera con creces lo que normalmente permito que se infiltre en mi vida.He aprendido, a través de los años, que hay varias prácticas que me ayudan a mantener el equilibrio emocional y físico durante las vacaciones. Éstos son algunos de ellos:
- Planifique con anticipación.
Si sé que me voy a encontrar en una situación que podría provocar un desequilibrio en mi salud física o emocional, trato de anticiparme a los desencadenantes de una manera que no provoque preocupación ni me lleve a temer la ocasión, así como lo más respuesta eficaz que podría utilizar para cada uno de ellos.También planeo cuidadosamente para aceptar participar en experiencias satisfactorias, en lugar de agotadoras. Está bien decir no a las actividades que agregan estrés innecesario. Hay algunas reuniones obligatorias en las que necesito hacer una aparición donde puede que no haya el ambiente más enriquecedor; Para esos eventos, planeo cuidadosamente cómo y con quién pasaré ese tiempo y, si es posible, también planeo una salida temprana elegante.
- Disfrute de una indulgencia moderada.
Sería injusto negarnos todos los placeres de las vacaciones. Debemos participar y saborear tantas de estas alegrías como sea posible, si estas experiencias no nos ponen a nosotros ni a nadie más en peligro real. En lugar de restringirnos universalmente, deberíamos disfrutar cada momento a medida que se presenta.Si bien puede parecer noble mantener las rutinas más estrictas de manera constante durante la temporada navideña, la apreciación en el momento, que probablemente conducirá a recuerdos preciados que durarán toda la vida, es más valiosa que la perfección ilusoria que en realidad puede contribuir a una mayor ansiedad. - Participa en actividades de centrado.
Las vacaciones pueden ser una época muy ocupada llena de muchas actividades y responsabilidades adicionales. Esto puede ser estresante y dificultarnos encontrar el tiempo para cuidarnos. Así como necesitamos planificar con anticipación para aprovechar al máximo las actividades de las fiestas, debemos planificar hacer tiempo para las actividades o el tiempo de tranquilidad para aterrizar y centrarnos. Estas experiencias especiales y reconstituyentes nos darán la fortaleza para valorar lo mejor de todas las bondades que se encuentran en los amigos, la familia y la comunidad que nos rodean durante esta temporada. - Reflejar.
Con todo el caos y el mercantilismo al que estamos expuestos durante las vacaciones, puede ser difícil recordar las verdaderas razones por las que esta época del año tiene un significado tan especial en nuestra sociedad. Tómese el tiempo para reflexionar sobre los valores que son más significativos para usted y use la temporada navideña como una oportunidad para vivir y compartir esos valores con los demás.