Los patrones de sueño alterados aumentan el riesgo de suicidio
Un nuevo estudio del Reino Unido encuentra un vínculo claro entre los problemas del sueño y los pensamientos y comportamientos suicidas.
Investigadores de la Universidad de Manchester y la Universidad de Oxford entrevistaron a 18 participantes sobre el papel que tienen los problemas del sueño en las tendencias suicidas.
A partir de las discusiones, los investigadores identificaron tres vías interrelacionadas hacia los pensamientos suicidas que surgen de los problemas del sueño.
La primera fue que estar despierto por la noche aumentaba los riesgos de pensamientos e intentos suicidas, lo que en parte se consideraba una consecuencia de la falta de ayuda o recursos disponibles durante la noche.
En segundo lugar, la investigación descubrió que una incapacidad prolongada para dormir bien por la noche dificultaba la vida de los encuestados, lo que se sumaba a la depresión y aumentaba el pensamiento negativo, las dificultades de atención y la inactividad.
Finalmente, los encuestados dijeron que dormir actuaba como una alternativa al suicidio, proporcionando un escape de sus problemas. Sin embargo, el deseo de utilizar el sueño como táctica de evitación llevó a un aumento del sueño durante el día, lo que a su vez provocó alteraciones en los patrones de sueño, reforzando las dos primeras vías.
El estudio se publica en BMJ abierto.
Donna Littlewood, autora principal del estudio, dijo que la investigación tiene implicaciones para los proveedores de servicios, como los especialistas en atención médica y los servicios sociales.
“Nuestra investigación subraya la importancia de restaurar un sueño saludable en relación con el manejo de problemas de salud mental, pensamientos suicidas y comportamientos.
Además, la necesidad de contar con servicios de apoyo adecuados durante la noche es fundamental, ya que los investigadores descubrieron que quienes están despiertos por la noche tienen un mayor riesgo de suicidio.
Fuente: Universidad de Manchester.