Evitar la tristeza navideña
Para muchos, la temporada navideña es un momento feliz asociado con la familia y los amigos, la buena comida y la celebración. Pero para otros, las vacaciones están marcadas por sentimientos de ansiedad y depresión, comúnmente conocidos como la tristeza de las fiestas.Los Holiday Blues se definen como sentimientos temporales de ansiedad o depresión durante las vacaciones, y aunque difieren de la ansiedad clínica o la depresión, aún deben tomarse en serio, ya que pueden provocar afecciones de salud mental a largo plazo. En una encuesta de NAMI, mostró que el 64 por ciento de las personas se ven afectadas por la depresión navideña y el 24 por ciento dice que se ven muy afectadas.
Hay una serie de factores estacionales que contribuyen a estos sentimientos, incluidos menos luz solar, cambios en la dieta y la rutina, aumento en el consumo de alcohol, estrés adicional por hospedar a familiares y amigos o la imposibilidad de estar con familiares y amigos.
Otros pueden desencadenarse por recuerdos sentimentales que resultan en sentimientos de soledad, tristeza, fatiga, tensión y una sensación de pérdida.
Durante este tiempo, es importante que todos se cuiden, pero es especialmente importante para aquellos que ya sufren de ansiedad o depresión de forma regular.
Tómese un tiempo a solas, pero no demasiado
Cuando se siente deprimido, es común querer evitar el esfuerzo de interactuar con los demás y estar solo, especialmente cuando hay un flujo constante de fiestas navideñas a las que asistir.
Si bien está bien y es saludable saltarse algunas reuniones para tomarse un tiempo para usted, no debe retirarse a la soledad total, ya que eso puede empeorar sus sentimientos de ansiedad o depresión. Los seres humanos por naturaleza son criaturas sociales y necesitan tener cierto sentido de comunidad para aumentar su autoestima, incluso cuando no les apetece.
Si no puede manejar el estrés de asistir a una fiesta, invite a algunos amigos cercanos o familiares, o haga una llamada telefónica y tenga una conversación rápida. De esa manera, aún se está acercando y rodeándose de seres queridos que lo apoyan sin el compromiso de asistir o ser anfitrión de una fiesta que requiera una pequeña charla y otros factores de estrés.
Dicho esto, tomarse un tiempo personal para serenarse y relajarse es crucial para mantener una buena salud mental en tiempos agitados.
Haz algo que no esté relacionado con las vacaciones
El hecho de que sea la temporada navideña no significa que deba pasar todo su tiempo comprando, horneando o preparando regalos y tarjetas para repartir.
Cuando las actividades de las vacaciones se vuelven demasiado estresantes, es importante dar un paso atrás y tomarse un tiempo para hacer algo que realmente disfrute.
En lugar de pasar el fin de semana en un centro comercial abarrotado y congestionado, salga y salga a caminar o simplemente dé un paseo por el vecindario. Si tiene tiempo libre de la escuela o del trabajo, utilícelo para leer el libro al que quería llegar o hacer un viaje.
Hagas lo que hagas, recuerda que las vacaciones son solo eventos y no es necesario que abarquen toda tu vida.
Todo con moderación
Pueden pasar muchas cosas entre los meses de noviembre y enero, lo que significa muchas fiestas, comida, alcohol y gastos. Esto puede hacer que las personas rompan sus hábitos normales y se sientan fuera de control, lo que conduce a un aumento de la ansiedad y la depresión.
Para mantener un sentido del equilibrio, sea realista acerca de lo que puede y no puede hacer y fíjese limitaciones.
Esto no significa que deba abstenerse de beber y comer en fiestas, o que no pueda comprar regalos para sus seres queridos, sino que lo hace con moderación para no desviarse de su rutina habitual.
Las vacaciones son más agradables cuando no estás estresado por las repercusiones de ellas más adelante.
Tómelo un día a la vez
Mirar las vacaciones como una temporada completa puede hacer que parezcan insuperables, pero si lo tomas día a día es mucho más digerible.
Hacer listas de tareas pendientes todos los días es una estrategia útil para delinear y priorizar algunas tareas a la vez en lugar de tratar de abordar todo a la vez. Al limitarse a unas pocas cosas al día, también puede disfrutar más de lo que está haciendo, en lugar de simplemente tratar de superarlo.
Por encima de todo, es importante recordar que cuando se gestionan correctamente, los Holiday Blues son temporales y pasarán.