Cómo deshacerse del perfeccionismo

Estaba sentado en una cafetería con mi amiga, mirándola desplazarse por Facebook. “No quiero lidiar con otro verano. No puedo soportar las selfies en bikini ".

Todavía faltan varios meses para el verano, pero entiendo el sentimiento. En Facebook, todo el mundo parece perfecto. Incluso las fotografías en sí están perfectamente iluminadas con software de edición de fotos o aplicaciones de teléfono que le permiten eliminar imperfecciones o jugar con la exposición. Ya sea que mi amigo y yo nos sintamos incómodos por tener "cuerpos de yoga" aparentemente inalcanzables o porque las bodas de destino son una tendencia, la perfección parece no solo alcanzable, sino que se espera.

Ser perfeccionista puede parecer el perfecto desdén. Es como la vieja pregunta de la entrevista de trabajo en la que se espera que le cuente al entrevistador su defecto personal. El perfeccionismo es siempre una respuesta imprescindible. Soy demasiado bueno, parece decir en el fondo de un desprecio autoinfligido. Sin embargo, a pesar de todo el estigma que puede tener un problema de perfeccionismo, realmente es un rasgo difícil de manejar. El perfeccionismo está relacionado tanto con la depresión como con la ansiedad y puede impedir que las personas avancen en la vida.

La personalidad perfeccionista típica la muestra alguien a quien le gusta el sentido de orden y control. Son impulsados, críticos y mantienen altos estándares de rendimiento. La mayoría de los perfeccionistas están ansiosos por complacer a los demás y tienen personalidades tipo A que se centran en la organización, la ambición y las habilidades de gestión. La decepción puede llegar fácilmente y el resultado es a menudo esforzarse.

Los diferentes tipos de perfeccionismo incluyen:

Perfeccionismo prescrito socialmente. Esto ocurre cuando el perfeccionista cree que otros los mantienen en un estándar más alto que el promedio. Pueden estar particularmente sintonizados con las críticas percibidas. Al no estar a la altura de los altos estándares, se daña el sentido de la autoestima y la autoestima.

Perfeccionismo autoorientado. Al establecer estándares personales rígidos, una persona que demuestra un perfeccionismo orientado a sí mismo puede volverse extremadamente crítica consigo misma, lo que lleva a la depresión. A menudo compiten con los demás, pero también con ellos mismos. No importa el resultado, siempre hay margen de mejora.

La Review of General Psychology encontró que los perfeccionistas tienen más probabilidades de suicidarse. Si bien todo puede verse bien por fuera, el crítico interno puede volverse abrumador. Los problemas de salud que comúnmente afectan a los perfeccionistas incluyen:

  • Fatiga inexplicable
  • Cardiopatía
  • Fibromialgia
  • Ansiedad crónica
  • Depresión
  • Anorexia
  • Acciones obsesivas compulsivas
  • Ataques de pánico
  • Problemas digestivos

Una cierta cantidad de perfeccionismo puede ser motivador e incluso saludable, pero si sospecha que puede ser un problema, pregúntese:

  • ¿Continúas luchando por un éxito específico incluso si te duele?
  • ¿Le han sugerido amigos o familiares que puede ser demasiado crítico con los demás?
  • ¿Estás demasiado a la defensiva cuando te critican?
  • ¿Hay un sentimiento perpetuo de que casi lo has logrado, pero no del todo?

Hay formas de entrenar el cerebro donde el perfeccionismo al menos puede pasar a un segundo plano. Los terapeutas de CBT pueden ayudar con este tipo de problema de salud mental, así como con pasos simples que se pueden tomar de forma independiente. Dependiendo de la gravedad de la situación, el tratamiento puede variar. Dado que el perfeccionismo suele ser un tipo de pensamiento de "todo o nada" que impulsa el perfeccionismo hacia adelante, las reglas concretas pueden ayudar a detener (o al menos ralentizar) la obsesión.

Aquí hay 3 sugerencias para perfeccionistas que quieren sentirse más felices:

  1. La palabra "debería" no es útil. Al eliminar esta palabra, la rigidez de la acción se vuelve menos poderosa.
  2. Vuélvase a la atención plena. Disminuir la velocidad del pensamiento puede ayudar a controlar la forma en que pensamos. Si elegimos actuar sobre esos pensamientos se vuelve más fácil y menos cargado de compulsión.
  3. Deja de compararte con otros. Como se dijo al principio, las redes sociales pueden ser un desastre para aquellos que luchan constantemente por la perfección. Incluso para aquellos que no son perfeccionistas, la estima puede verse afectada. Mantenerse alejado de las redes sociales puede tener resultados positivos tanto para la depresión como para la ansiedad.

El perfeccionismo, las comparaciones y una actitud de todo o nada pueden generar sentimientos de resentimiento, incluso con las personas que amas. Aunque todo el mundo ha escuchado la frase "nadie es perfecto", es bueno saber que estamos en buena compañía.

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